El hielo seco es la solidificación del dióxido de carbono. Su principal diferencia con respecto al hielo normal es que no pasa por el estado líquido, sino que lleva a cabo el proceso conocido como sublimación: cambia del estado sólido directamente al gaseoso. Por ello, se puede desechar sin dejar rastro, y no acumula bacterias como hace el agua.
Se utiliza también para la conservación de alimentos, aunque suele emplearse en grandes almacenes; también a la hora de mantener refrigeradas las medicinas en los hospitales, en determinadas condiciones. Debido a la “espectacularidad” que provoca su sublimación, también se emplea para crear efectos especiales en cine.
A la hora de manipularlo, siempre debemos hacerlo con guantes, y nunca puede dejarse mucho tiempo en la boca, ya que puede producir importantes quemaduras en el momento de cambio de estado. No se guarda en recipientes cerrados de forma hermética, sino que se utilizan los que sean porosos, que dejen escapar en cierta medida el aire.
El hielo seco es la solidificación del dióxido de carbono. Su principal diferencia con respecto al hielo normal es que no pasa por el estado líquido, sino que lleva a cabo el proceso conocido como sublimación: cambia del estado sólido directamente al gaseoso. Por ello, se puede desechar sin dejar rastro, y no acumula bacterias como hace el agua.
Se utiliza también para la conservación de alimentos, aunque suele emplearse en grandes almacenes; también a la hora de mantener refrigeradas las medicinas en los hospitales, en determinadas condiciones. Debido a la “espectacularidad” que provoca su sublimación, también se emplea para crear efectos especiales en cine.
A la hora de manipularlo, siempre debemos hacerlo con guantes, y nunca puede dejarse mucho tiempo en la boca, ya que puede producir importantes quemaduras en el momento de cambio de estado. No se guarda en recipientes cerrados de forma hermética, sino que se utilizan los que sean porosos, que dejen escapar en cierta medida el aire.
Was this answer helpful?
LikeDislike