A 88 kilómetros de la capital de Bélgica, Bruselas, se encuentra la “Venecia del norte”, es decir, Brujas. La gran cantidad de canales que hay en esta ciudad belga hace que se le llame de esta manera. Está considerada como una de las ciudades más bellas y que mejor conservadas están de la época medieval en Europa. En el año 2.000 su casco antiguo fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Si se viaja a Brujas, una visita más que obligada debe ser a la Basílica de la Santa Sangre, lugar en el que se encuentra la reliquia de la Santa Sangre de Jesucristo.
A 88 kilómetros de la capital de Bélgica, Bruselas, se encuentra la “Venecia del norte”, es decir, Brujas. La gran cantidad de canales que hay en esta ciudad belga hace que se le llame de esta manera. Está considerada como una de las ciudades más bellas y que mejor conservadas están de la época medieval en Europa. En el año 2.000 su casco antiguo fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Si se viaja a Brujas, una visita más que obligada debe ser a la Basílica de la Santa Sangre, lugar en el que se encuentra la reliquia de la Santa Sangre de Jesucristo.