Los abrelatas al estar fabricados de metal o hierro, es normal que con el paso del tiempo se vayan oxidando, sobre todo, tras lavarlos o ponerlos en contacto con todo tipo de líquido.
Por ello, os traemos algún consejo para evitar que se oxiden.
Lo que debemos hacer es limpiarlo de vez en cuando con gasolina y aplicar después un poco de aceite de oliva. Si por otro lado, nuestro abrelatas ya está oxidado, primero tendremos que frotarlo con medio limón cubierto de sal gruesa, y después, frotar con la gasolina.
Los abrelatas al estar fabricados de metal o hierro, es normal que con el paso del tiempo se vayan oxidando, sobre todo, tras lavarlos o ponerlos en contacto con todo tipo de líquido.
Por ello, os traemos algún consejo para evitar que se oxiden.
Lo que debemos hacer es limpiarlo de vez en cuando con gasolina y aplicar después un poco de aceite de oliva. Si por otro lado, nuestro abrelatas ya está oxidado, primero tendremos que frotarlo con medio limón cubierto de sal gruesa, y después, frotar con la gasolina.
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